El Principe William y Kate Middleton han tomado una decisión significativa para el futuro de su familia. La pareja de la realeza británica ha decidido mudarse fuera de Londres en un intento por ofrecer a sus hijos una vida más ‘normal’. Esta medida ha sido confirmada por el Palacio de Kensington, quien emitió un comunicado acerca de este cambio.
La nueva residencia de la familia real será Adelaide Cottage, una encantadora casa de cuatro habitaciones situada en los terrenos del Castillo de Windsor, en Berkshire, a aproximadamente 25 millas de Londres. Este movimiento no solo proporcionará una mayor privacidad a la familia, sino que también los reunirá con la Reina Isabel II y la familia de Kate, quienes también residen en el mismo condado.
A pesar de este cambio, se aclara que el Palacio de Kensington seguirá siendo la residencia principal de la familia, lo que significa que aún tendrán acceso a las responsabilidades reales que conlleva vivir en la capital británica.
Por otro lado, se ha confirmado que George, Charlotte y Louis se trasladarán a Lambrook School, una prestigiosa escuela privada cerca del Castillo de Windsor. El director de la escuela, Jonathan Perry, ha expresado su entusiasmo diciendo: «Estamos encantados de que el Príncipe George, la Princesa Charlotte y el Príncipe Louis se unan a nosotros el próximo septiembre».
En el comunicado, también se aclaró que actualmente no hay planes para asistencia en el hogar, aunque es posible que se consideren arreglos para una niñera en la propiedad.
William y Kate han agradecido cordialmente a la antigua escuela de sus hijos en Londres, Thomas’s Battersea, por ofrecer un «buen comienzo» a los pequeños. Todo esto se enmarca en el deseo de la pareja de ser «padres activos» y dar a sus hijos la posibilidad de crecer de manera más tradicional, alejada del ojo público.
Esta decisión ha dejado claro que la pareja busca equilibrar sus deberes reales con su deseo de proporcionar un entorno familiar estable para sus hijos. Quieren ser una familia lo más ‘normal’ posible, permitiendo que sus hijos disfruten de su infancia sin el constante escrutinio de los medios.
A medida que se aproximan a este cambio, tanto la familia real como sus seguidores anticipan el inicio de esta nueva etapa en la vida familiar de William y Kate. Estoy seguro de que será un viaje emocionante y lleno de nuevas aventuras para la familia real británica. 😊