Se acaba de descubrir un ecosistema «alienígena» en una parte remota del desierto de Atacama que es «diferente» a todo lo visto antes, reveló un equipo de científicos.

El increíble mosaico de lagunas cristalinas rodeadas de vastas salinas estaba ubicado en la Puna de Atacama de Argentina, una meseta gigante a más de 12,000 pies sobre el nivel del mar.

Este es uno de los entornos más secos de la Tierra, donde rara vez llueve (o nunca) y la luz del sol golpea implacablemente el terreno, creando un entorno en el que pocos animales o plantas pueden sobrevivir.

Y, sin embargo, en abril del año pasado, el geólogo Brian Hynek, de la Universidad de Colorado en Boulder (CU), estaba mirando imágenes satelitales de la región cuando se topó con lo que parecía una red de lagunas.

Intrigados, él y la microbióloga María Farías condujeron lo más lejos posible hacia las misteriosas formaciones y luego caminaron varios kilómetros bajo el sol abrasador, según un informe. comunicado de prensa publicado por CU.

“En algunos lugares estábamos sumergidos en aguanieve salado hasta las rodillas”, dijo Hynek.

Pero tan pronto como llegaron al sitio, supieron que valía la pena: habían descubierto algo realmente extraordinario.

Montículos de estromatolitos verdes florecen en el fondo de una de las lagunas de Atacama (Brian Hynek)

Allí descubrieron una red de 12 lagunas, que abarcan aproximadamente 10,1 hectáreas y están rodeadas de montañas áridas en la distancia.

Debajo de sus aguas relucientes, Hynek vio enormes montículos de vegetación verde, de unos 15 pies de ancho y varios pies de alto.

Los identificó como estromatolitos: comunidades microbianas complejas que forman enormes montículos rocosos a medida que crecen, de forma muy parecida a como los corales construyen arrecifes.

Sin embargo, estos no se parecían a nada que los científicos hubieran visto antes.

Estas comunidades pueden parecerse a los estromatolitos que existieron durante un período de la historia de la Tierra llamado Arcaico Temprano, cuando el oxígeno era casi inexistente en la atmósfera, sugieren observaciones preliminares.

«Esta laguna podría ser uno de los mejores ejemplos modernos de los primeros signos de vida en la Tierra», dijo Hynek.

«No se parece a nada que haya visto jamás ni, en realidad, a nada que haya visto ningún científico».

Aunque hoy en día existen estromatolitos en la Tierra, incluso frente a la costa de las Bahamas, estos grupos microbianos modernos tienden a ser relativamente pequeños. También crecen pasivamente atrapando granos de arena y otros desechos que flotan en el mar, señala CU en su comunicado de prensa.

Por el contrario, los estromatolitos antiguos podían alcanzar hasta 20 pies de altura y succionaban activamente calcio y dióxido de carbono del agua circundante, provocando que los minerales se precipitaran a su alrededor.

Hynek usó un martillo para abrir una formación de estromatolito y revelar su centro rosado.(Brian Hynek)

Los montículos encontrados en las lagunas de Atacama se parecían más a estas comunidades arcaicas que a cualquier cosa en la Tierra hoy.

Sus capas de roca estaban hechas principalmente de yeso, un mineral que se ve comúnmente en los fósiles de estromatolitos pero que está ausente en casi todos los estromatolitos modernos.

Biológicamente, incluían una capa externa de microbios fotosintéticos llamados cianobacterias y un núcleo rosado rico en arqueas, organismos unicelulares que a menudo se encuentran en los ambientes más extremos del mundo.

Hynek también señaló que el entorno de la laguna podría parecerse a las condiciones de la Tierra antigua, con sus aguas saladas y ácidas y su exposición a una intensa radiación solar (debido a su gran altitud).

Además, las comunidades de estromatolitos también podrían ofrecer a los expertos una visión sin precedentes de cómo pudo haber surgido la vida en Marte, que se parecía a nuestro propio planeta hace miles de millones de años.

“Si alguna vez hubiera evolucionado vida en Marte a nivel fósil, habría sido así”, afirmó el geólogo y físico espacial.

«Comprender estas comunidades modernas en la Tierra podría informarnos sobre lo que debemos buscar cuando buscamos características similares en rocas marcianas».

Hynek (en la foto) describió el descubrimiento de las lagunas como “el mayor momento eureka” de su vida.(Bryan Hynek)

Hynek y Farías esperan realizar más experimentos para confirmar que estos estromatolitos previamente desconocidos están construyendo activamente sus formaciones rocosas y comprender cómo los microbios pueden sobrevivir en condiciones tan duras.

Sin embargo, es posible que se les acabe el tiempo.

Una empresa radicada fuera de Argentina ya destinó el área para la extracción de litio.

Una vez que comience este proceso, las lagunas de Atacama podrían quedar prácticamente arruinadas.

«Todo este ecosistema único podría desaparecer en unos pocos años», dijo Hynek. «Esperamos poder proteger algunos de estos sitios, o al menos detallar lo que hay allí antes de que desaparezca o sea perturbado para siempre».

Describió el descubrimiento del entorno extraterrestre como «el mayor momento eureka que he experimentado en mi vida».

«Es simplemente sorprendente que todavía se puedan encontrar cosas indocumentadas como estas en nuestro planeta», dijo.

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